Los orígenes del Círculo del Retiro se remontan a finales de los años 80, al grupo al que Liu Chenyuan enseñaba Taichichuan estilo Yang en este parque histórico de Madrid. Con él descubrimos los miembros más antiguos del Círculo lo que era realmente el Taichichuan y sus posibilidades en el cultivo de la salud, el arte marcial y el desarrollo personal, pero también la importancia del Zhong Ding, que él definía como la virtud budista de mantener centrado el corazón.
Tras el fallecimiento de Liu en 1992 y la dispersión del grupo pasaron unos años en los que cada uno intentó seguir avanzando y profundizando en la práctica, a solas o con otros profesores. En diferentes ocasiones Liu nos había recomendado aprender el estilo Chen, y en mayo de 2000 conocimos a Liang Puwan, acupuntor y masajista chino afincado en Madrid que había aprendido Taichichuan estilo Chen de la línea de Pekín con Lei Muni, uno de los principales discípulos de Chen Fake, el gran divulgador de este estilo.
Liang accedió a darnos una clase los sábados, y así tuvimos la gran suerte de beneficiarnos de los frutos de sus once años de aprendizaje con Lei Muni, de sus vastos conocimientos de otras artes marciales internas y de sus largos años de práctica personal y estudio. Todo ello, junto a su generosidad a la hora de compartir estos conocimientos y a la claridad de sus explicaciones, nos permitió volver a experimentar la satisfacción de un progreso sólido y constante.
En 2002 se constituyó el Círculo del Retiro formalmente como asociación, y a lo largo de los años siguientes algunos de los miembros más antiguos del grupo empezamos a enseñar el sistema con la aprobación de Liang. El grupo siguió consolidándose y en 2003 nos lanzamos a organizar el Primer Encuentro de Taichichuan de Madrid en el parque que nos ha acogido desde nuestros inicios, y que se ha seguido celebrando anualmente hasta la actualidad. En 2011, debido a que su consulta de acupuntura cada vez le exigía más atención, Liang encomendó la dirección del grupo a Luis Soldevila, que ha seguido dirigiendo las clases hasta ahora con la ayuda de los profesores más antiguos del grupo.
Lo que nos impresionó y nos atrajo de Liu Chenyuan cuando lo conocimos, la autenticidad de su Taichichuan, su calidad humana y su sentido del humor, el compañerismo y el espíritu de fraternidad que inculcaba a sus alumnos, volvimos a encontrarlo casi diez años después en Liang. A lo largo de estos años hemos intentado honrar las enseñanzas de ambos manteniendo un grupo que enseña y practica Taichichuan tradicional al aire libre en un ambiente de ayuda mutua y hermandad.
Sube